martes, 5 de febrero de 2013

Michael Dell no soporta que comparen su compañía con Apple

Mientras Apple ganaba participación de mercado con el iPhone y el iPad, el presidente ejecutivo del fabricante de computadoras de escritorio Dell Inc.DELL +1.15% veía cómo se desmoronaban el liderazgo y las ganancias de la empresa que fundó en su dormitorio en la Universidad de Texas hace casi 30 años.
Cuando salía a relucir el tema de Apple, Dell se ponía tenso y se volvía introvertido, cuentan ex ejecutivos de la empresa tecnológica. Asimismo, el ejecutivo a veces celebraba victorias pequeñas, como que las escuelas de toda una ciudad compraran computadoras Dell.
Aunque la empresa ganaba algunas batallas, Dell se rehusaba a aceptar que su compañía estaba perdiendo la guerra, dijo un ex ejecutivo.
Ahora, Dell podría hacer que las comparaciones con Apple pasen a ser insignificantes con una decisión radical: retirar a Dell del mercado bursátil con una adquisición apalancada valorada en más de US$23.000 millones.
La venta representaría una admisión por parte de Dell de que los cambios que necesita para que los ingresos y ganancias de su compañía vuelvan a crecer son demasiado difíciles de conseguir bajo el escrutinio de Wall Street. Al mismo tiempo, la compra garantizaría al ejecutivo de 47 años la potestad de supervisar cualquier cambio.
En general, entrevistas con más de 10 ex ejecutivos y empleados actuales de Dell, y otras personas que conocen al líder corporativo, describen a un hombre cada vez más preocupado por su legado y una posible alienación por parte de la junta directiva. Estas personas dicen que, desde hace años, Dell no muestra el mismo entusiasmo que exhibió cuando recuperó la presidencia ejecutiva en 2007, tras un corto período durante el cual solo encabezó la junta directiva.
Ahora que la acción de Dell ha caído más de 44% desde el regreso de su fundador y la compañía está al borde del abismo, las fuentes aseguran que la decisión de cerrar el capital de la empresa tiene tanto que ver con Dell el empresario que con Dell la empresa. "Es sencillo: su nombre está en juego", dijo un ex ejecutivo.
Dell, quien trabajó activamente en la venta de su empresa, no respondió a un pedido para hacer comentarios. Un vocero de la compañía con sede en Texas declinó pronunciarse al respecto.
El ejecutivo no ha dicho cuáles son sus planes para Dell tras su venta, pero la empresa ha invertido miles de millones de dólares en los últimos años para adquirir un portafolio de servicios y productos, incluidos sistemas de almacenamiento y software de seguridad, con el objetivo de reinventarse como una versión reducida deInternational Business Machines Corp. IBM -0.40% En 2009, pagó US$3.900 millones por la firma de tercerización tecnológica Perot Systems Corp. y US$2.400 millones en 2012 por Quest Software, además de cerrar acuerdos por activos menores. El año pasado, creó una división que se concentra en la venta de software corporativo.
Los analistas creen que ahora Dell tiene la mayoría de las piezas que necesita para convertirse en una empresa de tecnología diversificada. Pero tiene que hacer que todas esas piezas encajen. Un Dell de capital cerrado podría hacer eso y quizá retirarse de partes del negocio de PC con menores márgenes de ganancia, como ventas minoristas directas a consumidores, dijeron.
Los ingresos de la empresa se han mantenido casi planos desde el año fiscal 2008, cuando registró ventas de US$61.000 millones. En el año fiscal que terminó en febrero de 2012, facturó US$62.000 millones. La ganancia del año fiscal 2012 fue de US$3.500 millones, casi un récord, pero se espera que caiga sustancialmente este lapso.
Dell siempre ha estado acostumbrado al éxito. Fundó su empresa en 1984 y para cuando dejó las riendas en 2004, la había convertido en el mayor vendedor de computadoras de escritorio del mundo. Se calcula que el valor neto de Dell es de alrededor de US$14.000 millones.
En el proceso, Dell perdió su corona de computadoras personales en 2006, a medida que el fabricante dependía más de ventas minoristas, algo que evitó por mucho tiempo a favor de ventas directas a los consumidores. Cuando Dell regresó en enero de 2007, prometió reposicionar la empresa para la nueva era.
Dell trajo consigo varios nuevos ejecutivos. Las ventas crecieron durante el primer año tras su regreso, pero fueron perdiendo fuerza.
Según fuentes cercanas, Dell dejó de mostrarse entusiasmado por la empresa en reuniones privadas y también se alejó de la luz pública, delegando funciones a ejecutivos cercanos.
Dell seguía encargándose de las revisiones operativas, aseguran personas que asistían a esas reuniones, pero parecía concentrarse más en detalles minúsculos en vez de grandes decisiones estratégicas. Hace varios años, Dell redactó un informe de cuatro páginas después de probar por primera vez el XPS One, una computadora de alta gama que incorporaba todas sus partes en el monitor. Las anotaciones de Dell, enviadas esa noche que recibió la máquina, incluían sus ideas sobre la espuma de poliestireno utilizada para empacar la computadora.
Personas que trabajaron con él dicen que es una persona reservada que no muestra mucho sus emociones. En cambio, agregan, disfruta trabajando con ingenieros o involucrándose directamente con un producto.
Para fines de 2010, Dell había abandonado en gran parte sus esfuerzos de desarrollar productos para consumidores y defendió un nuevo camino para convertirse en un proveedor de servicios para empresas. Invirtió miles de millones de dólares en comprar desarrolladores de software de seguridad, sistemas de almacenamiento y otros productos conforme iba expandiendo su portafolio.
Los productos para empresas tienen márgenes más altos que las PC, pero por ahora no han logrado compensar los declives en el negocio de computadoras del fabricante, que todavía representa la mitad de su facturación anual de US$62.000 millones. En general, las ventas de PC cayeron 13% en los primeros tres trimestres del año fiscal de 2013.
Dell ha tratado de posicionar la empresa como algo más que un fabricante de PC, haciendo hincapié en que las máquinas representan apenas un tercio de la ganancia de Dell. Personas que han trabajado con el ejecutivo creen que habrá cambios en el negocio de computadoras personales pero no anticipan que Dell abandone del todo la producción de PC.
Dell ha reconocido que algunos de los cambios en la industria de las PC lo tomaron desprevenido, sobre todo el surgimiento de las tabletas.
"No lo vi venir", reconoció en una entrevista en 2011 con The Wall Street Journal y añadió que no se esperaba que los usuarios corporativos renunciaran tan pronto a las PC.
—Ian Sherr y Don Clark contribuyeron a este artículo

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